Ante la sequía que está afectando los lagos del Canal, Gatún y Alajuela, las autoridades han tomado medidas para garantizar la operación de la vía.
La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) ha alertado que los lagos artificiales que alimentan no solo a la vía interoceánica, sino también al 55% de la población del país, han iniciado el 2016 con niveles anormalmente bajos para la época.
"Es una situación única en 100 años", afirmó el vicepresidente de Ambiente, Agua y Energía de la ACP, Carlos Vargas, al hablar del bajo caudal de los ríos y cuentas hidrográficas panameñas.
Indicó que los lagos podrían alcanzar niveles nunca antes vistos en la historia del Canal.
"Hay una situación muy aguda, muy difícil y gracias a los proyectos de profundización del cauce del Canal realizado desde el año 2000 han permitido que los tránsitos en el Canal puedan continuar sin aplicar restricciones en el calado", explicó.
La Autoridad del Canal de Panamá ha adoptado medidas como la compra de equipos para optimizar la producción de agua.
Vargas informó que la entidad adquirió ocho nuevas bombas para garantizar que las potabilizadoras puedan funcionar perfectamente en la temporada seca.
Además, desde hace varios años, la Administración del Canal ha ido modificando las operaciones en las esclusas y se ha logrado ahorrar mucha cantidad de agua", agregó.
Vargas enfatizó que más allá de los planes o estrategias de la ACP para generar y conservar el agua, la sequía de este año y todas las que previsiblemente pueden presentarse en el futuro solo podrán ser superadas exitosamente si los habitantes de Panamá hacen un uso racional del recurso.
"En este momento difícil es cuando se hace más importante que las personas cuiden el recurso hídrico, ahorren agua, porque no es posible que consumamos el doble del agua potable per cápita respecto a los demás países Latinoamericanos", afirmó.
Indicó que las rupturas en las tuberías son parte del gran consumo de agua, así como y el uso inadecuado en los hogares.
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