"Panamá no cumple satisfactoriamente en materia de transparencia fiscal", así lo determinó ayer el foro de la Ocde sobre transparencia fiscal, aunque el Gobierno asegura que ha tomado medidas para superar las deficiencias.
El informe fue divulgado durante la plenaria del Foro Global sobre Transparencia e Intercambio de Información con Fines Fiscales de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde), celebrada en Tiflis,Georgia, según detalló la agencia de noticias AFP.
En el encuentro, Panamá y otros países, incluyendo Bahréin y Líbano, se comprometieron a intercambiar automáticamente información de cuentas financieras con otros países.
Gian Castillero, asesor de la Cancillería, admitió que el Gobierno "no esperaba una buena calificación", en vista de que los avances que se han hecho para blindar el sistema financiero de Panamá no pudieron ser tomados en cuenta para este informe, que abarca de julio 2012 a junio 2015.
Hizo énfasis en dos normas que fueron aprobadas a principios de 2015 por la Asamblea, una de las cuales levanta el velo de los beneficiarios de empresas offshore y la otra inmoviliza las acciones al portador.
Baja calificaciónEsta mala calificación se suma a la hecha recientemente por la calificadora Standar & Poors, la cual determinó que existe una "tendencia negativa del riesgo de la industria bancaria", por lo que el economista Juan Jované advirtió del peligro de un efecto cascada.
El presidente Juan Carlos Varela reconoció que lo dicho por Standar & Poors "no es una noticia positiva", pero intentó matizar su alcance, asegurando que el próximo 15 de noviembre la comisión multidisciplinaria entregará su informe sobre mejoras al sistema bancario.
Según Varela, esto ayudará a mejorar la imagen internacional de Panamá, manchada por la sombra de posible paraíso fiscal.
En este sentido, el Gobierno se ha ocupado en bajar el perfil a recientes escándalos que han afectado el sector financiero, como el "caso Waked" y los papeles de Panamá.
Pero contrario a la visión del Gobierno, para Standar & Poors los efectos de estos escándalos siguen vigentes y dejan al descubierto debilidades en el marco institucional de Panamá.
En forma más puntual, S&P desmejoró las perspectivas que pasaron de estables a negativas.
Y aunque el mote de "industria bancaria riesgosa" causa un efecto negativo en la imagen internacional del país, Varela no lo ve así.
De hecho, afirmó que en sus recientes giras por Europa y Asia ha recibido un "feedback" positivo con respecto a la manera en que se percibe en el extranjero la reacción de Panamá al tema del lavado de dinero.
"La canciller [Angela] Merkel y el primer ministro de Japón [Shinzo Abe] han reconocido el esfuerzo de Panamá y su compromiso con la transparencia financiera", dijo el presidente Juan Carlos Varela.
Aunque reconoció públicamente lo difícil que ha sido para este Gobierno enfrentar sendos escándalos, que han impactado en el sector financiero.
"Lo reconozco, pero lo estoy enfrentando con la frente en alto, dejando un mensaje claro, que el éxito de nuestra economía está ligado al trabajo honesto de los panameños", dijo.
A manera de defensa por los señalamientos de falta de transparencia de la Ocde, Varela resaltó medidas recientes, como la eliminación de las acciones al portador y la exigencia de registros contables.
Y hasta se aventuró a decir que Panamá superará estos atolladeros financieros, y será un "modelo a seguir en cómo se manejan estas situaciones".
Pero el economista Demetrio Ríos Lam salió al paso de estos pronunciamientos, y advirtió que mientras la mano política siga inmiscuida en aspectos financieros y bancarios per se, nuestra economía no podrá enrumbar su maltrecha imagen, para recuperar su pujanza característica.
"Esto es lo que ocurre cuando abogados y financistas de cuestionada transparencia se cubren con el manto de políticos y reclaman protección", así lo consideró el economista Ríos Lam.